Máxima Acuña Chaupe y su familia han sido
propietarios del terreno en litigo desde 1994. En 2011, la Policía Nacional del
Perú, junto con personal de la empresa minera Yanacocha, golpearon a la familia
y dejaron a Máxima Acuña Chaupe y a su hija Jhilda Chaupe inconscientes durante
un violento intento de desalojo forzoso.
A pesar que los miembros de la familia denunciaron
las violaciones de derechos humanos sufridas, su denuncia fue archivada sin
debidamente llevar a cabo una investigación exhaustiva. En cambio, el 05 de
agosto 2014, el juzgado Unipersonal de Celendín manifestó que la familia era
culpable de usurpar terreno de la empresa minera Yanacocha, y sentenció a la
familia a 2 años y 8 meses de prisión suspendida, más el pago de S/.5500 Soles
a la empresa minera por daños.
Esta sentencia fue apelada por la familia y se
tendrá la última audiencia este 20 de noviembre 2014 en la Sala Penal de
Apelaciones del Poder Judicial de Cajamarca. Después de esto, la Sala Penal
tendrá como plazo veinte días para pronunciar su decisión final.
Máxima y su familia temen por su vida, seguridad y
futuro ya que si la apelación es rechazada, la familia podrá ser desalojada y
estar expuesta a violaciones de derechos humanos.
“Temo por mi vida, por la vida de mi esposo, por la
vida de mis niños y por la vida de las personas en mi comunidad que defienden a
nosotros y a nuestra agua” (Máxima Chaupe).
Por favor firma la petición instando a las
autoridades peruanas a que se respeten los derechos humanos de Máxima y su
familia.
Fuente: pueblosencamino
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